Luis Alfonso Zurita Córdoba

Me llamo Luis Alfonso Zurita Córdoba, nacido y criado en un barrio muy popular de la ciudad de Cartagena en Olaya Herrera donde la convivencia era muy buena y de cultura muy alegre a pesar de los múltiples problemas a diarios por diferentes factores, somos seis hermanos, es decir, cinco hombres y una hembra yo soy el quinto de esa hermandad.

Para alcanzar metas y logros desde muy pequeño me ha tocado pasar por muchas situaciones como por ejemplo vender platanito, patacón, helado o paletas, después de esa larga jornada me tocaba ir a la escuela cosa que nunca abandone en mi vida, luego de haber pasado por todo ese proceso dificultoso para mí en ese momento me toco someterme a un sorteo que les hacían a los bachilleres de ese entonces ya que no contaba con solo$ 17.000 pesos para tramite de una libreta militar por tanto ingrese a las filas militares, y a pesar que fui por un año me quede por cuatro y no era por lo que me gustaba sino por las pocas oportunidades que yo veía a fuera, una vez pasado por este proceso de instrucción y formación militar decidí retornar al entorno familiar y buscar nuevamente la academia pensando mucho lo que una vez me dijo mi mejor maestra mi madre “mijo si vas a ser malo estudia y si vas hacer bueno estudia” no me dejo otra opción que el estudio por eso siempre he sostenido que la mejor enseñanza está en la casa y el mejor aprendizaje en el tejido familiar el cual le permite al ser humano en especial a mi aprender de la mejor universidad que es la universidad de la vida a la cual no se le puede meter machete de ahí es que valoro la familia es el tesoro más grande que puedo tener por eso la cuido y la protejo y aunque me critiquen la defino sin apartarme de mi figura paternal como una empresa en la cual yo soy el representante legal mi esposa la gerente general nuestro hijos los trabajadores el cual tienen que cumplir un reglamento interno basado en el respeto la tolerancia la solidaridad es decir valores y principios ante todo y que sepan que las cosas no se dan sino que se ganan basado en un buen comportamiento. A ellos le cuento lo difícil que ha sido llegar hasta donde yo he llegado les conté mis experiencia en la vida militar la primera vez que entraba a un batallón todo lo que nos gritaban “conscripto, cosa con ojos, electrodomésticos ustedes no se merecen el aire que respiran” después de un tiempo me trasladaron una unidad especial llamada batallón de fuerzas especiales me acuerdo que llegamos veinte soldados y nos recibió un sargento con las siguientes descripción: alto de 1.80 mts aproximadamente, fornido a demás sin uniforme bastante miliciano usaba una sudadera roja era calvo con un pequeño moño en la cabeza llegando a la frente se parecía a chacazulu y nos dijo: “formar atención fir y miro hacia el cielo y dijo en el cielo Dios y en la tierra yo el destroyer y después de mi no existe nadie más” y yo le dije que belleza y preguntó que quien fue el soldado que dijo así y como nadie le contesto nos mandó a dar una vuelta a una bolla como a cien metros de distancia del muelle donde nos encontrábamos y dijo que los tres últimos que llegaran se devolvían y los tres primeros que llegamos al muelle nos tocó devolveros por orden de el mismo porque se estaba ahogando un compañero de nombre Paz Urrea Andrés a quien le decíamos el grillo, para no entrar en detalles fueron muchas la experiencias y las vivencias durante esa etapa de mi vida la cual me hicieron reflexionar y dar una mirada hacia el futuro, que más seria bueno para mi sino una complementación entre toda esa experiencia y vivencia que fueron enseñanza que lo que hicieron fue fortalecerme y complementar esto con el aprendizaje en la universidad en mi pregrado interactuar con los profesores, mis compañeros de salón más aun ampliar mis conocimientos en mi posgrado y ahora en mi maestría que hemos venido realizando un trabajo de investigación desde su inicio y me ha tocado soportarme al Jair y me faltan 12 meses más aguantándomelo y para terminar con esto a aquí les presento a modesto.

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